viernes, 9 de enero de 2015

Mujer.

Lo que mi lengua hable o lama, no es asunto tuyo.
Si mis pechos son grandes o pequeños, descubiertos o tapados, no son para ti.
El largo de mi falda no va acorde a la estrechez de tu mente.
Mis vaqueros o mis mallas nada tienen que decirte.
Si mis ojos pinto o no, no está relacionado con tu forma de verme a mí.
Que me dirija a ti, te sonría o sea amable, es porque soy un ser humano pacífico. Pero me puedo defender y si me atacas, responderé.
No te busco, mi vestimenta o mis gestos no van dirigidos a ti. Son sólo míos, para mí. Mi cuerpo no gira alrededor de tu libido.
Puedo decir que sí y después decir que no. Puedo quererte sólo una noche o para toda la vida.
Tengo voz, aunque os empeñéis en taparla, y gritaré y no soy una histérica por ello.
Puedo ser sumisa, puta o simplemente, yo misma.
Puedo maquillarme, peinarme, ponerme tacones. O hacer justo lo contrario. Todo ello puede formar parte de mí.
No quiero gustarte a ti en concreto, quiero gustarme a mí en general.
No me convences con tus etiquetas.
Nunca jamás tendrás ningún derecho a hacerme nada en contra de mi voluntad.
No eres libre de ofenderme allá por donde vaya, no te permito que me acoses.
Mis tatuajes son míos y nada tienen que ver con mi mente.
Mi culo lo uso para sentarme, gracias, no para que tú lo mires.
Pero si quiero que lo mires, soy perfectamente libre de enseñártelo y hacer lo que quiera.
No soy más débil que tú porque la fortaleza de un ser humano, no se mide.
No tengo que darte pena, no tienes que protegerme. Tienes que crear un mundo en el que no haga falta proteger a nadie.
Soy bella, preciosa, única. Soy cuerpo, alma y mente. Corazón, miedos y dudas. Y no entro en los márgenes de tu estética, en tu limitada visión del mundo. Soy bonita porque me quiero, soy bonita porque amo, soy bonita porque lucho, soy bonita porque soy humana y lloro, río, desespero, me cabreo, me rindo y vuelvo a levantarme. Soy maravillosa porque sonrío ante un mundo que se pudre por dentro y por fuera.
Cada vez que me tocas sin consentimiento, cada vez que te crees que tienes derecho a controlarme, cada vez que me dueles por verme inferior, cada vez por pensar que soy diferente a ti. Cada vez que menosprecias a una mujer, a otra persona o a otro animal, pierdes una parte de ti. Pierdes amor y respeto. Pierdes mi respeto, mi tolerancia y mi paciencia.

https://www.youtube.com/watch?v=6kQZ0nfPTfs&index=11&list=PLD1EFA0D0CE049623

No hay comentarios:

Publicar un comentario